#3 una vez un madrileño intento convencerme que lo habían inventado ellos.
Como mi meter una rodajas de calamar a la romana dentro de un trozo de pan fuera el summun culinario o algo así, y como si no hubiera miles de bares por todo el país que los venden.
Anda que no me he hinchado a bocadillos de calamares en Zaragoza.
#3 Pues el famoso El Brillante no está en la plaza mayor.
Pero estoy de acuerdo. Solo conozco a un madrileño que considere el bocata de calamares como algo típico. La inmensa mayoría repiten (sin conocerse entre ellos) que solo lo comen cuando llevan a alguien que está de visita y pide comer uno.
#21
"Los científicos creen que los luchadores de sumo son saludables. Tienen niveles normales de triglicéridos, un tipo de grasa en la sangre, y niveles inesperadamente bajos de colesterol, los cuales reducen el riesgo de cardiopatía, ataque cardíaco y accidente cerebrovascular."
#135 pues nada, todo está estupendo. Cuando no nos quede gente a la que explotar ni planeta que contaminar nos comeremos los unos a los otros diciendo: "En fin, no hay sistema mejor".
#10 currante a currar! qué gran película que muestra la idiosincrasia española en el ambiente laboral. El hijoputismo y el buenismo representados perfectamente, sin olvidar el sentimentalismo exagerado cultivado por el cine del franquismo.