Pues yo, que de facha poco, estoy de acuerdo en el fondo del artículo en lo referente a lo de los musulmanes. Lo que no entiendo es por qué aquí hay tanta comentando cuando existe la posibilidad de rebatir al que escribe comentando en el propio blog. Si es que hay argumentos para ello, claro.
En cuanto a lo de que el Real Madrid es una entidad privada y puede hacer lo que quiera con sus cosas, cae por su propio peso. Pero también se podrá criticar si no nos parece bien, ¿no? O sea igual que criticamos a los ultraliberales por defender a las empresas que sólo quieren hacer dinero a costa de los trabajadores, por ejemplo.
Esto de los exámenes, amañados o no, es una solemne soplapollez, para empezar. Lo que no es tanta soplapollez es, por ejemplo, por qué un juez prevaricador parece que va a presentarse como candidato por IU, lo que se asume como normal; o, por poner otro ejemplo, por qué un periódico se deshace de quien lo dirigió durante 25 años y a la vez cambia su línea editorial, haciéndose más marianista que mariana (razón por la que, siendo Aguirre la aguijoneada desde el citado periódico, la noticia me merece tanta confianza como los propios exámenes de marras); o, por poner un tercer ejemplo, por qué se adivina que un buen puñado de españoles aceptan con normalidad en el juego político a un partido, o lo que sea el Podemos este, de obvio perfil estatalista totalitario. Podríamos seguir sine die, pero aburre.
#4 Pues, oye, a mí que me parece cristalino... Parece que la cosa es así: Podemos es un partido comunista y anti sistema, y por lo tanto anti democrático. Y el personal está atontao, no se entera y juega a los demócratas, que es como jugar a los médicos pero en política. Esto de dar cancha a los totalitarios les pasó a los alemanes en su momento. Como planteamiento no es que sea muy complicado ni muy novedoso. Más bien es básico. Lo que sorprende es que haya alguien que no lo entienda.
En cuanto a lo de que el Real Madrid es una entidad privada y puede hacer lo que quiera con sus cosas, cae por su propio peso. Pero también se podrá criticar si no nos parece bien, ¿no? O sea igual que criticamos a los ultraliberales por defender a las empresas que sólo quieren hacer dinero a costa de los trabajadores, por ejemplo.