"No se puede decir que la política de Trump no haya sido agresiva, incluso en ocasiones altamente temeraria, ni que no haya puesto en grave peligro la paz mundial. Pero en los hechos Donald Trump es el único presidente de las últimas décadas que culmina su mandato sin haber embarcado de forma directa a Estados Unidos en un nuevo conflicto bélico de envergadura.
Por el contrario, su predecesor Barack Obama -del que fue vicepresidente Joe Biden- es el único presidente norteamericano que ostenta el récord de ejercer dos mandatos completos -ocho años- con el país en guerra todos y cada uno de sus días, incluido el día que recibió el Premio Nobel de la Paz.
Juntos, Obama y Biden, bombardearon Afganistán, Libia, Somalia, Pakistán, Yemen, Irak y Siria; promovieron golpes de Estado -los llamados «blandos» y los descarnadamente duros- en Honduras y Paraguay; y desestabilizaron Venezuela, Brasil, Ecuador y Bolivia; además de diseñar y alentar «primaveras» y «revoluciones de colores» en el Magreb y en Ucrania.
"No se puede decir que la política de Trump no haya sido agresiva, incluso en ocasiones altamente temeraria, ni que no haya puesto en grave peligro la paz mundial. Pero en los hechos Donald Trump es el único presidente de las últimas décadas que culmina su mandato sin haber embarcado de forma directa a Estados Unidos en un nuevo conflicto bélico de envergadura.
Por el contrario, su predecesor Barack Obama -del que fue vicepresidente Joe Biden- es el único presidente norteamericano que ostenta el récord de ejercer dos mandatos completos -ocho años- con el país en guerra todos y cada uno de sus días, incluido el día que recibió el Premio Nobel de la Paz.
Juntos, Obama y Biden, bombardearon Afganistán, Libia, Somalia, Pakistán, Yemen, Irak y Siria; promovieron golpes de Estado -los llamados «blandos» y los descarnadamente duros- en Honduras y Paraguay; y desestabilizaron Venezuela, Brasil, Ecuador y Bolivia; además de diseñar y alentar «primaveras» y «revoluciones de colores» en el Magreb y en Ucrania.