En el retiro hay muchas expresiones culturales de todo tipo. Si la gente se quiere reunir para bailar hay un espacio para ello, si la gente quiere hacer tai-chi hay espacio para ello, si la gente quiere hacer canto tibetano, hay espacio para ello, si la gente quiere ver a la banda municipal tocar, hay espacio para ello. ¿Por qué no va a haber un espacio para la gente que quiera tocar sus tambores o sus didjeridoos, o sus caxixis, o sus darbukas, o sus berimbaos? Yo paso de manera habitual y puedes encontrar rincones tranquilos para pasear o tumbarte un rato en la hierba. Nadie se queja del recorte que sufrió el Retiro en programaciones cultural, ya que quitaron los conciertos de la programación del Bosque del Recuerdo, que por cierto estaba fenomenal. Lo que quiere esta corporación municipal es acabar con la vida cultural, no sólo de parques sino de la vida de toda la ciudad. Y eso si, una vez al año decir, wow, hacemos la noche en blanco.
A la tamborrada YA!
Este envío debería estar ya en portada para que de alguna manera se conozca el dinero que se está derrochando en equipaciones y chiringuitos TIC sin sentido, mientras los profesionales con pocos medios montan actividades que hacen que los chicos y chicas de hoy trabajen con las mismos recursos que hay en la red para los adultos. Blogs, podcast, twitter, presentaciones, etc.
No entiendo los comentarios que descalifican sin argumentos.