aunque hay cosas que mejorarán en el futuro, hay otras que son inherentes a los materiales y al proceso que no cambiarán y que limitan mucho lo que podemos hacer de forma doméstica (y económica) con estas impresoras.
Además, el mercado ha demostrado muchas veces como absorber aquello que le amenaza. Seguiríamos teniendo que comprar el material crudo y todos sabemos lo que ha pasado con las impresoras normales y la tinta...