Hace ya varias horas que acabó el partido y sigo sin creérmelo. Estamos en toda una final de un mundial y hemos llegado a ella dando lecciones de futbol a toda una Alemania.
Gracias chicos. Sois muy grandes.
Siempre había pensado que eso de ver a mi selección en semifinales no iba a ser para mí.
Gracias a esos 23 locos (y al del bigote) por demostrarme que estaba equivocado.