Me parece muy buena noticia tal como va el país. Eso sí, me imagino que con las elecciones del año que viene el Congres se querrá apuntar un tanto. Otra cosa es cómo van a hacer llegar la comida a esos 800 millones de personas. Tengo entendido que medidas por el estilo ya se han hecho en otras ocasiones, pero debido a las malísimas condiciones de algunas carreteras mucha de esa comida se queda en los transportes pudriéndose sin que llegue a su destino.
#6 sí, la verdad es que me lo pregunto cada día. Y creo que, pese que a través de los ojos de un occidental que está acostumbrado a que se respeten todas las normas de circulación y que tiene que alucinar con cómo se conduce en estos paises, la sensación que da después de un tiempo es de que la gente en su gran mayoría va muy despacito y se respeta mucho al conductor de al lado. El uso constante del pito del coche es una demostración de ese respeto. A los occidentales el oir el bocinazo de otro conductor nos da la sensación de que se está quejando, o llamando la atención, o directamente insultando y nos pone de los nervios. Sin embargo aquí no ocurre eso, se usa para avisar de que estás ahí y para pedir preferencia. Vamos, que aquí hay muchísimo pitido y sorprendentemente muy pocas caras de perro, ni insultos, ni faltas de respeto.