#12#15 Hay bastantes datos para poder afirmar que así es, la han estudiado diferentes especialistas en niños ferales, por ejemplo, el Dr. Bruce D. Perry (www.childtrauma.org/aboutCTA/bio_bruce.asp) y se le han dedicado varios programas de TV, uno de ellos en el 2001 en Discovery Channel. También se habla de su caso en la Wikipedia (en.wikipedia.org/wiki/Oxana_Malaya)
4#, la frase latina es "Cogito ergo sum", cuya traducción sería "pienso, luego existo" (y no "pienso y existo", como dices). Por otro lado, el razonamiento parte de la duda metódica como método para alcanzar la verdad, para llegar a algo de cuya existencia no pudiera dudar... y no Descartes comprendió que podía dudar de todo, salvo de que dudaba, es decir, no podía negarse a sí mismo como sujeto que dudaba, como ente existente que pensaba. De ahí se sigue el "pienso, luego existo", es decir, la existencia es una consecuencia lógica de la duda, del pensamiento.
Es decir, al contrario de lo que afirmas, la existencia sí es consecuencia del pensar.
Por otra parte, te has liado con lo del cráneo al que se refiere el título, que no es otro que el del propio Descartes. Léete el artículo y comprenderás por qué hablan de un cráneo. Nadie ha dicho nada de ningún cráneo de Shakespeare (imagino que te refieres a la calavera del bufón que sostiene Hamlet).