Una vez, en la facultad de filología de Valencia, un cura, miembro del comité que había hecho la traducción oficial de la Biblia al valenciano nos explicó que en el Vaticano, el encargado de darles el "nihil obstat" era un belga francófono. Y lo primero que les preguntó era por qué habían hecho aquel esfuerzo, "porque en francés también decimos "petit" y "menut" y nadie se extraña". El problema es la maniobra del fascismo españolista valenciano que es muy interesante y en parte exitosa, pero no me cabe aquí. Si queréis, hablamos de sus raíces y su desarrollo, pero no os daré la chapa aquí.
Lo malo es que en dos días (una legislatura) tendréis a la Thatcher madrileña arrasando y dejando a Abascal como un socialdemócrata clásico. Porque en España nunca se puede subestimar el número de subnormales.
Alarmistas que sois: con la de plantitas que gracias a Ayuso habrá en los balcones, sobran árboles, carajo. Macchu Picchu: ¡otro carajillo, que nos estamos amariconando!
Porque los catalanes, y más los de "Yuns" (como se pronuncia en las teles mesetarias) ya han perdido sensibilidad y memoria. Y olvidan cuando Aznar casi se atraganta leyendo fragmentos del "Elogi de la paraula" de Joan Maragall y luego casi se apunta a la peña Almogàvers del Barça.
Y es el tipo más insoportable y pedante de la historia del cine. Además de gilipollas integral. Si nace 40 años después, nos ahorramos muchos bodrios y él estaría indemnizando a gente por llamarla "caraanchoa".
Por cierto, debe ser que en Ucrania son todos primos de los noruegos, porque si no no se entiende que unos eslavos, que eran igual de Untermenschen que los judíos para Adolfito, sean nazis. El gilipollismo es lo que tiene.
#10 Me encanta Berto, pero en monólogos suyos como este, o como el famoso de la pegatina de los aparatos electrónicos, la herencia de Faemino y Cansado es evidente: exagerar la reacción hasta el absurdo descacharrante, como en el sketch de Arroyito y Pozuelón sobre las uñas de los pies.
#4 Pues ese día, si mal no recuerdo, Buenafuente dio una réplica brutal a Sánchez Dragó. El listillo, creyendo que estaba haciendo una ironía digna del ingenio de Quevedo, burlándose del "hecho diferencial" catalán, preguntó algó así (cito de memoria): "Es que a mí Barcelona me encanta, pero no entiendo por qué alguna gente insiste en ciertas cosas: ¿qué pasa en Barcelona? ¿Hay alguna diferencia horaria con Madrid, o algo así?" Y Buenafuente replicó: "Uy, Fernando, a veces hasta de siglos"...
¿Este no era el que, si no lo sujetan, él solo le iba a pegar una paliza a una pandilla de indepes y maricas que estaban manifestándose ante uno de sus mítines en Badalona? Vaya, otro que "es la tormenta" pero que cae como un héroe de la "libertaz" ante miradas (y cabezazos) de odio. Esto ya lo hacían en los años 30. A otro perro con ese hueso.
La población de Estados Unidos es, de forma ampliamente mayoritaria, lo que allá llaman "liberal". Solo un sistema político hecho en el siglo XIX para no perjudicar determinados intereses sigue permitiendo la elección de auténticos monstruos.