Estas fotografías captan la Leningrado de posguerra, ahora San Petersburgo, de 1946 a 1950, revelando la vida cotidiana de los ciudadanos soviéticos en medio de los profundos esfuerzos de reconstrucción de la ciudad. Las escenas van desde obreros restaurando la catedral de San Isaac hasta una mujer puliendo cuidadosamente una pieza de exposición en el Museo del Hermitage. Aunque la guerra había terminado, Leningrado estaba en ruinas. Años de incesantes ataques aéreos, bombardeos e incendios habían devastado la infraestructura de la ciudad.