Otras personas que crearon este tipo de listas se centraron en trabajos que eran especialmente sucios, como granjero de gongs o cazador de ratas. Sin embargo, si nos atenemos a las investigaciones del conocido historiador Jacques Le Goff, podemos encontrar una forma totalmente distinta de descubrir los peores trabajos. En su libro Time, Work, and Culture in the Middle Ages (Tiempo, trabajo y cultura en la Edad Media), detalla las "profesiones despreciables", es decir, aquellos trabajos que los medievales consideraban realmenmente terribles.