Amigo, ¿Cómo estás? ¡Cada vez que te recuerdo siento tanta alegría porque hayas conseguido tus objetivos! Por fin tienes seguridad laboral, familiar, puedes planear tu futuro. Me siento orgulloso de ti. Y ese tema tuyo… espero que siga controlado. Entendí que nos separáramos durante tanto tiempo. Un proceso tan duro y largo como tus oposiciones, tus problemas con la familia, la casa, la salud… cada vez que te disculpabas por no estar ahí casi que me ofendía. “- Pero, ¿Qué dices? Quita,...