Sinceramente este año estoy muy poco inspirado, mi otrora inquebrantable espíritu navideño para con la gente de buena voluntad se ha visto mermado por los constantes ataques lumínicos y sonoros de Abel Caballero y la tendencia de mis sobrinas a drenarme la vida desde por la mañana temprano como los pequeños súcubos que son. Tener bronquitis no ayuda. Manda cojones que yo juraría que cuando fumaba estas cosas se me curaban más rápido.... O igual es que me estoy haciendo viejo. Muy viejo para esta mierda
Independientemente de ello y estableciendo la sana separación entre la ñoñez habitual de estas fechas seguramente alentada por los fuertes subidones de glucosa, y cualquier otra interpretación místico religiosa de su agrado, me dirijo a usted, estimado lector, para agradecerle otro añito más de discusiones a cara de perro, desagravios, conductas pasivo agresivas, mentiras, falacias, insultos y algún que otro meme. Sin su estimable colaboración mi productividad habría mejorado en el trabajo y así no se hace país.
Sin mas dilación felicitarle las fiestas y recordar que pese a nuestras posibles diferencias, es en estos momentos cuando recuerdo lo que a todos nos une, la esperanza de que en navidad, ninguna tortilla se quede sin cebolla.