El lago salado Poopó, el segundo más extenso de Bolivia, se ha evaporado por completo y Proba-V, un minisatélite de la Agencia Espacial Europea, ha podido observar su desaparición desde el espacio. El lago, que poseía una profundidad media de solo tres metros, se ha vaporizado en otras ocasiones –la última en 1994–, pero los expertos temen que tarde muchos años en volver a tener agua o que no llegue a hacerlo. Situado en una depresión de la cordillera del Altiplano, cubría unos 3.000 kilómetros cuadrados, una superficie ligeramente inferior