Día -1, último día de quimioterapia. Mañana coronamos el Everest. Madrugaremos, como de normal, para que me realicen analíticas de sangre y demás historias. Pero lo importante es que no volverán a colgarme bolsas de quimio arriba de mi cabeza. Sólo pensarlo me produce liberación. Aunque soy consciente de que los efectos del tratamiento de esta semana…
Comentarios
Estupendo, mientras no tires las bolsas vacías por ahí ....