Baja disponibilidad de energía (LEA), huesos débiles y problemas menstruales. Desde hace años, la literatura científica deportiva ha observado estos tres problemas con cierta recurrencia en las deportistas. En 1993, con la combinación de estas afecciones, se definió la Triada Femenina, un estado en el que las deportistas sufrían amenorrea, pérdida de densidad mineral ósea y trastornos alimentarios. Siguiendo esta línea de investigación, en 2014, se acuñó el término Síndrome de deficiencia energética en el deporte (REDs), que puede manifestarse
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