Publicado hace 2 horas por Ripio a historia.nationalgeographic.com.es

Hoy sabemos que cada ciudad tenía sus hombres listos para combatir. Eran sobre todo nobles, los mejor adiestrados y que podían disponer de un equipamiento más completo. El militar de más alto rango era el nacóm, que se elegía entre los mejores por un período de tres años. Además de dirigir las tropas, también actuaba como sacerdote castrense. El batab, el segundo mando en importancia, recibía y transmitía las órdenes del nacóm en el campo de batalla. Los guerreros especialmente valientes eran los holcattes.

Comentarios

CharlesBrowson

Hasta que llego un chicharrachero extremeño con sus panas seductores cargado de espejitos y el resto ya es otra historia

#1 Cuando llegó el extremeño allí, el Imperio Maya estaba más acabado que José Manuel Soto.