La Policía Nacional de Castellón forzó el aterrizaje de un dron dotado de una cámara de grabación de alta calidad que sobrevolaba la comisaría de la ciudad y que finalmente fue estrellado en el Palau de la Festa, contiguo a las dependencias policiales, al acercarse al perímetro de seguridad. El dueño del dron, de 30 años, fue identificado, y el informe con las características del aparato enviado para valorar su sanción a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, además de una propuesta de sanción por aplicación de la Ley de Seguridad Ciudadana.