Tal vez sea una obsesión mía, pero nada me gustaría más que poder trabajar mirando al mar o directamente en el mar. Debo de ser una de entre muchos porque he encontrado un diseñador que, no pudiendo llevarse su equipo de trabajo a la playa, ha decidido llevar la playa a su zona de trabajo y ha colocado su escritorio sobre arena de playa.
Comentarios
Justin Kemp es lo peor. Además, su postura en la silla le traerá problemas de cervicales en el futuro, fijo.
Ya son ganas...se nota que él no limpia después si no...
#1 Nada, hombre, nada. Luego viene la asistenta y como los chorros del oro.