Acostarse sobre él, peinarlo, acariciarlo y presumirlo a sus amigos es lo que Manuel y Adrián más disfrutan de la visita de Ores, un perro propiedad de su abuela que pesa más de 100 kilos y que hoy está de visita en su casa pues radica en Tucson. Fotos: http://www.elimparcial.com/Galerias/homenew.aspx?NumGaleria=10027