Chechenia, en el imaginario colectivo español (y no es una excepción), no es un lugar: es una guerra. Una guerra sucia, manchada de petróleo y corrupción endémica que comenzó en 1994 y que, tras un breve paréntesis, ha sido cerrada en falso por el ya ex presidente ruso Vladímir Putin, con la implantación de una paz de cementerio gobernada por el sátrapa local, Ramzán Kadyrov.
Comentarios
#0 Deberías pensar en variar tus fuentes, que no todo sea revistapueblos.org
Léete http://blog.meneame.net/2007/06/05/control-de-diversidad-de-fuentes
pobriñhos los chechenos