Hace un tiempo se dio a conocer que se podía pasear desnudo por Barcelona libremente, siempre y cuando no se "ofendiera" a nadie. Desde entonces no se ha sabido nada más del tema, pero parece que hay quien se lo toma al pie de la letra y prefiere aprovechar todo el sol desde que sale de casa, aunque pase por las calles más transitadas. Los peatones y turistas se sorprenden con humor.