Llegar a lo más alto en un partido es una tarea ardua, complicada, con luces y sombras. ¿A quién tienen que conquistar los aspirantes para poder ser cabeza de cartel o el líder? Detrás de las entrevistas y los anuncios rimbombantes, los políticos con ambición se han tenido que trabajar más los pasillos que el sí de sus militantes para alcanzar el máximo escalón. Poco a poco, sistemas de elección más abiertos se van haciendo hueco en la democracia española.
Comentarios
Al final, por mucho que quieras cambiar un partido por dentro, como en todos sitios, los que tienen la sartén por el mango te hacen pasar por sus mecanismos y resortes, para manejarte y descartarte en caso de que no vayas por donde se debe ir.