Son pocas las campañas publicitarias que logran combinar adecuadamente la creatividad con los objetivos de marketing del anunciante. Hay casos en que la creatividad se "traga" al producto y el consumidor sólo recuerda el "gimmick" o golpe final de humor; en su mente simplemente no está la marca. En este artículo, una campaña tiene mayor riesgo de caer en el error que la otra...