Vivimos tiempos extraños, y si bien técnicamente el hombre nunca había llegado tan lejos, espiritualmente hacia siglos que no estaba tan perdido. Y digo espiritualmente como podría decir éticamente o moralmente. La mayor parte de la sociedad ha perdido el Norte y reniega de la religión, cosa totalmente licita sino fuese sustituida por la idolatría al memo de turno que gobierna en tal cual nación, ayuntamiento o región. Algo así pasa con la Bolsa, hace años que ha perdido el Norte...
Comentarios
Que más me da adorar a cristo que a San Dolar, toda imagen o ídolo a seguir irracionalmente lleva a irse a tomar por el culo. Tanto me da torquemada, al que en secreto idolatra nuestro santo pontífice que los adoradores de San Dólar, gurús de la avaricia y la codicia.
Je,je,je, ¡muy acertado!.
Ultimamente se adora a falsos ídolos.
Y la crisis es consecuencia de esto y de la ineficacia de los políticos que tenemos.