Steve Jobs consiguió reflotar Apple cuando ésta se encontraba al borde de la quiebra. Gracias a su perfeccionismo, temperamento, pasión por el trabajo... ha sabido posicionar a Apple como líder tecnológico. Está claro que la situación de Apple cuando llegó en 1996 (pleno declive) no tiene nada que ver con la de ahora, pero eso no ha evitado que cada vez que anuncia una baja por salud, las acciones de Apple caigan. ¿Podrá Apple mantener sus productos en la cima cuando no esté Jobs? Es la pregunta del millón...
Comentarios
Que acabará cuesta abajo como Microsoft cuando desapareció Bill Gates.
En clase de historia me enseñaron que las personas individuales no son tan importantes como parece. Si alguien no hace algo, otra persona sí lo hará. Quizá en otro sitio y quizá en otro momento, pero si las circunstancias propician algo, acabará sucediendo.
Jobs será importante, y su carácter ha sido clave, pero no será imprescindible. Sólo hay que encontrar un buen sustituto.