Durante un siglo, las montañas del Valle de Ribes han acogido a Marina Vilalta y sus ovejas. Desde que era una niña, la única de doce hermanos que disfrutaba ayudando a su padre con el ganado, antes de la Guerra Civil, hasta hoy, que tiene 96 años, esta mujer ha conducido su rebaño por las praderas de este rincón del Pirineo de Girona. “Escribirás un libro de miserias porque esta es una vida de miserias. ¿No ves que aquí siempre hemos sido pobres? A todos lados con las ovejas, que ya no dan nada. Y ya está”, ante la propuesta de narrar su vida.