Los flanes o quesillos son una maravillosa opción de postre: son suaves, delicados y de gran sabor. Se cocinan en baño de María y generalmente hay que hornearlos por una hora. Pero la espera vale la pena. Eso es lo que sucede con este flan de avena, que queda delicioso
Comentarios
Falta el ingrediente secreto del chef
Creo que le falta un poco de azúcar a la receta, menudo empalague.