Pasé por el punto kilométrico 38 de la carretera C-17 minutos antes de que un coche se llevara por delante a dos mossos d’esquadra que asistían a un vehículo siniestrado. Tuve ocasión de ver a los mossos disfrazados de capitán Pescanova, cubiertos hasta la gorra de color amarillo fosforito, muy cantón, y vi el coche al que asistían. Lo vi casi todo… menos el atropello. Lo vi casi todo… a no ser que yo esté equivocado y que ese atropello se produjera cuando asistían a otro vehículo detenido en el mismo punto de la vía.
Comentarios
A la carretera no hay que tenerle miedo, sino respeto
Me quedo con esta frase que resume muy bien lo que cada día tenemos que tener en cuenta antes de ponernos al volante.