La misofilia es un tipo de parafilia en la que el placer sexual y la consecución del orgasmo son obtenidos exclusivamente al tener contacto con (o incluso ingerir, lamer, masticar...) sustancias desechadas por el cuerpo humano o con objetos sucios en general (pantalones, medias, blusas...); esto es, aunque lo habitual es relacionarla con el fetichismo sexual asociado a la ropa sucia -sobre todo la ropa íntima-.