Siguiendo con la tónica habitual de estos últimos meses, los delincuentes han vuelto a adaptar una campaña previa para tratar de conseguir nuevas víctimas. En esta ocasión se trata de una campaña similar a la de hace un par de meses donde se suplantaba la identidad de la empresa Correos España y se trataba de obtener los datos de la tarjeta de crédito de la víctima, estrategia que ha sido ligeramente retocada pero que persigue el mismo fin.