Desde 2010, el año de arranque de la primera generación de coches eléctricos de la era moderna, hasta 2016, la bajada de precio ha sido constante. Todos los años se ha producido un descenso en el coste del kWh. Pero entre 2015 y 2016, el recorte de costes ha sido muy importante, con un descenso del 35%. Un paso que se debería mejorarse en el periodo 2017-2018, donde la producción tenderá a incrementare de forma notable gracias en gran parte a la llegada de nuevos modelos que también añadirán un mayor atractivo hacía el público general.
|
etiquetas: baterías , coche eléctrico , sostenibilidad , movilidad , contaminación