Hace pocos días los principales medios se hacían eco de la noticia donde se afirmaba que el Estado Islámico había desarrollado una aplicación cifrada para móviles. Según esta noticia, publicada en Newsweek, Fortune y otros diarios de gran tirada el EI entregaba esta herramienta a sus células durmientes y yihadistas para poder enviarles ordenes sin ser descubiertos. Pero tras consultar a expertos en el tema y revolver la red en busca de esta aplicación, o al menos una copia, ha sido imposible encontrarla, no existe, todo es una burda invención.