En los años 30, para viajar cómodamente con aire acondicionado se necesitaba un "enfriador de pantano" acoplado a la ventanilla del coche. Estos aparatos fueron populares hasta la década de 1960, antes de que el aire acondicionado moderno se convirtiera en un equipamiento de serie en la mayoría de los coches. Los modelos de menor costo dependían del movimiento del automóvil para empujar el aire a través del refrigerador.