En la argumentación que acompaña a la interpelación a Ares, el representante de Aralar manifiesta que "el primer golpe recibido fue al preguntar, en euskera, por qué se estaba golpeando a uno de los manifestantes, cuando, en ese momento se estaba alejando, tal y como le exigía el agente". Basabe añade que "el segundo y posteriores golpes se produjeron mientras le pedía su identificación al agente, en euskera". Al parecer, según indica Aralar, "el agente decidió parar cuando Basabe, ya en castellano, se identificó como parlamentario.