Internet puede ser un lugar maravilloso. Toda una perogrullada esta afirmación en pleno 2014, desde luego, pero es una de las muchas cosas que se le vienen a uno a la cabeza después de llegar hasta Olivier Otten, el hombre al que puedes asustar, ahogar, hacer pedalear y, en general, controlar con tu ratón.
|
etiquetas: artista , interactividad , internet