Si hay alguien que sabe bien lo caro que puede salir un debate, ése es Miguel Ángel Rodríguez. Hoy es el gran estratega de Isabel Díaz Ayuso. En 1993 lo era de José María Aznar. Nadie en España recuerda mejor que él cómo su jefe perdió aquellas elecciones por un debate, el segundo, que le salió rematadamente mal. Miguel Ángel Rodríguez aprendió bien la lección, igual que lo hizo el Partido Popular. En las elecciones de 1996 –que por la mínima venció Aznar– no hubo ningún debate. Tampoco en el año 2000, ni en 2004, por las mismas razones
|
etiquetas: democracia , elecciones , 4m , debate