La broma macabra que le gastó a una amiga cibernética por Halloween sobrepasó la raya y acabó en la Comisaría de Policía. Una asturiana de 16 años se personó el lunes acompañada de sus padres en la Jefatura Superior de Policía de Asturias explicando que había recibido un mensaje a través de la red social Tuenti en el que una chica a la que tenía agregada como amiga le manifestaba su intención de suicidarse.