Hace pocas semanas vi morir a un niño por neumonía en Ghana. Tenía tres años. Su padre le ordenaba que no se marchara tan pronto. "Sigue aquí, sigue aquí, aguanta", le decía. No le hizo caso. Y tenía suerte: se encontraba en un hospital. Hace más tiempo, ví agonizar a otro, enfermo de malaria y diarrea, en Sierra Leona. Con menos fortuna: el centro sanitario más cercano estaba a un día de camino (andando, no todo el mundo tiene transporte en este mundo).
|
etiquetas: áfrica , cooperación , solidaridad , omg , emergencia