El hecho característico y que unifica a todos los emprendedores, es el hecho de que deben inscribirse en el Régimen Especial de Trabajador Autónomo (RETA) de la seguridad social, lo que supone que el autónomo debe pagar a la seguridad social cada mes un mínimo de unos 255 euros para tener acceso a la pensión de jubilación ya la prestación por incapacidad temporal (baja laboral. Otro tema a considerar es que el emprendedor o autónomo debe saber cómo debe desarrollar su actividad, es decir con qué forma jurídica vestirá su actividad.