Si nunca has visto funcionar una cerradura «por dentro», no te cansarás de verlo. Es así de simple, pero también complicado a la vez. Esta vieja animación es de Stian Berg Larsen y muestra en acción una típica cerradura de tambor de pines de las más corrientes – tan antigua que ya se usaba en Egipto hace dos mil años. El sistema es totalmente analógico, con piezas de metal, muelles y las
#$@ llaves que milenios después todavía no han podido ser reemplazadas a gran escala, debido sin duda a lo prácticas que resultan: todos llevamos alguna.