Sin habernos recuperado aún de los gastos navideños, casi todos con tarjeta, las comuniones acechan a la vuelta de la esquina. Las novedades, este año, no sólo están en los trajes de princesa y de almirante para los chicos: los fotógrafos aprenden nuevas técnicas para inmortalizar esta fecha, la más consumista de todas las fiestas religiosas, después de la Navidad.
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