Curiosity no tiene paneles solares, como sus predecesores en la superficie marciana. La magia está en la cola, ligeramente levantada y rodeada de aletas de refrigeración. Curiosity funciona, se mueve, vive gracias a un corazón nuclear. Su nombre: generador termoeléctrico de radioisótopos, o RTG (por las siglas del inglés Radioisotope Thermoelectric Generator). Vamos a dar un paseo para conocer y comprender un poco mejor el qué, algo de los cómos y un poco de los porqués de este pequeño milagro de la tecnología.
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