El ministro de Finanzas, Michalis Sarris, había sido, en 2012, presidente del grupo Laiki. ¿Por qué a nosotros nos hunden y los otros paraísos fiscales, como los de las islillas británicas de Man o Guernsey, o Luxemburgo, se quedan tan panchos? Este victimismo chipriota es bastante tontorrón. Si apenas nadie hurga en esos lugares es porque no piden dinero a los socios para ser rescatados de una quiebra. Y como en la mili, solo recibe palos quien no logra pasar desapercibido.
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