Érase una vez un grupo formado por un cantante castrado napoleónico, un bajista erótico, un alcohólico magistral con capa, Gollum cuando sólo llevaba unos años con el Anillo Único y el equivalente en batería prog a Ringo Starr manco. Todos genios respetados. Lo que pasa es que los miembros de dicha formación, llamada Yes, hacían cosas malas: Rick Wakeman, el de la capa, se dedicaba a beber como un suicida y, lo que es peor, a hacer espectáculos de prog sobre hielo. Lo de Jon Anderson, el pequeño Napoleón, era mucho más grave: además era vegano.
|
etiquetas: yes