La discográfica de la banda 30 Seconds to Mars ha decidido demandar al grupo por la suma de 30.000.000 de US dólares tras la decisión del grupo de rescindir el contrato de forma legal. El detonante de todo esto ha sido que, de las ventas de su último álbum,
A Beautiful Lie, el grupo no percibió ni un sólo royaltie, y además EMI/Virgin reclamaba íntegros los beneficios de su próximo álbum más la suma de 1.4 millones de dólares, que debía aportar el grupo. Traducción en
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