Ocupan bancos, sentadas en los edificios del gobierno y el rugido de su rabia contra su propio gobierno y el de la canciller alemana, Angela Merkel. También usan bastones y muletas para llegar a estas llamadas "acciones" -debido a que su edad promedio es de 70-. Estas abuelas y abuelos españoles, que forman parte de un movimiento de protesta para las personas mayores llamado "yayoflautas", dicen que nunca se es demasiado viejo para una revolución.
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