Su nombre significa “la respuesta”. Karabo, fósil antropomorfo hallado en 2008 y cuya antigüedad es de casi dos millones de años, es posiblemente el eslabón perdido en la cadena evolutiva que, según la ciencia, conecta a los monos con el ser humano. Para mostrar el cómo pudo lucir el individuo, un artista lo recreó.
|
etiquetas: australopitecus sediba , sudáfrica , karabo , paleontología , evolución