Francia podría establecer una pausa en las medidas para el desarrollo de los biocarburantes de primera generación para paliar la crisis de los precios de los alimentos, según ha declarado el ministro de medio ambiente Jean Louis Borloo, aunque se garantizará la rentabilidad de las inversiones ya realizadas hasta la fecha. El ministro ha señalado que la esperanza está puesta en los biocarburantes de segunda generación, que no compitan con los productos agroalimentarios.Vía:
afp.google.com/article/ALeqM5jGKrmC5aZGBUJ5-YihukbBGOB76g