Hay vicios que se trasladan incluso a los animales de la casa. Este cigarrillo, aunque está apagado, no deja de ser una tentación irresistible para el pequeño gatito que no duda en ponérselo en la boca y jugar con él y se resiste con gruñidos y arañasos a dejarlo.
|
etiquetas: gato , cigarro , addicion